El círculo vocacional xaveriano de la ciudad de Torreón, Coah., es una realidad que nació y se fomenta dentro del entorno de los adolescentes y jóvenes varones con la finalidad de hacer crecer en ellos y en las familias la cultura vocacional. Es decir, crear un espacio, en donde el nacimiento de grandes proyectos, el despertar y reconocimiento de hermosísimas virtudes y dones que los muchachos poseen y la afluencia de la enorme energía que caracteriza, los muchachos tengan también la fortuna de conocer y profundizar acerca de los temas fundamentales que los ayuden a posicionarse de una manera más adecuada a la toma de decisiones y elecciones que en un futuro bastante próximo ellos han de tener delante de sí.
Contrariamente a lo que algunas personas pudieran pensar, el circulo vocacional, no es un grupo en donde únicamente se realizan prácticas de piedad o donde solo asisten muchachos que se sienten completamente convencidos de una vocación sacerdotal o religiosa. Este grupo es más bien un equipo de amigos que juntos van descubriendo que Dios tiene un proyecto para ellos y que es necesario que estén lo mejor informados para conocerlo y asumirlo con libertad y de una forma gustosa.
El círculo vocacional les brinda las herramientas para que ellos descubran los diferentes tipos de vocaciones que existen, a saber: la vida matrimonial, la soltería, la vida sacerdotal y la vida consagrada. Dentro de un verdadero ambiente de juego y convivencia, los muchachos van comprendiendo cuáles son las obligaciones y los derechos de cada una de esas vocaciones. A través de temas, reflexiones y proyecciones escuchan anécdotas y testimonios reales que les enseñan y los invitan a la reflexión y a la meditación.
Pero no solamente eso, el círculo vocacional tiene un abanico bastante amplio de temas de interés para los muchachos. Temas que tratan sobre la convivencia y el compromiso de una vida familiar sana, consejos también para un desenvolvimiento social del joven o adolescente, los riesgos más comunes que se les pueden presentar en esas dos etapas y la forma de afrontarlos con mayor responsabilidad y serenidad con la ayuda de las personas que tienen en su entorno, principalmente sus familiares más allegados.
También se tratan temas que son riesgos para ellos como el bullying, el pandillerismo, el alcoholismo, las drogas u otras adicciones propias de este tiempo como lo puede ser el exceso de internet o del smartphone. Este grupo de amigos también disfrutan de espacios de oración y reflexión en donde son invitados a asimilar los grandes valores de la fe cristiana como la solidaridad, el respeto y el servicio. Se les invita también a conocer y comprometerse de una manera más activa en sus comunidades parroquiales y formar parte de algún grupo de apoyo en las mismas ya sea como monaguillos, lectores, monitores o integrarse en algún grupo.
En resumidas cuentas, ser parte del círculo vocacional es una experiencia enriquecedora y divertida que brinda a los muchachos importantes experiencias para toda su vida.
